La investigación señala que este volcán funciona como una entrada intergaláctica entre dos ubicaciones en el tiempo y espacio, también aseguran que podría existir una civilización tecnológica avanzada oculta en la tierra en bases submarinas profundas, incluso llaman a estos posibles seres criptoterrestres.
Este planteamiento no es una simple locura; se basa en los continuos avistamientos de fenómenos aéreos no identificados (UAP, por sus siglas en inglés), también conocidos como OVNIs, que se han registrado sobre este volcán.
Este estudio es parte del Programa de Florecimiento Humano de Harvard y la Universidad Tecnológica de Montana.

