Doce elementos de la Policía Municipal de Tlapanalá, renunciaron en solidaridad por la suspensión determinada en sesión de Cabildo, del director de Seguridad Pública, Erick Rodríguez, quienes acusaron al alcalde en funciones y que contiende por la reelección, el priista Silverio Galicia Baltazar que incurrió en anomalías como la devolución de motocicletas, con reporte de robo.
El titular de Seguridad Pública Municipal, fue suspendido por mayoría de votos de los integrantes del Cabildo, debido a que “había quejas de la población por su mal carácter, con quien hubo intercambio de palabras”, según trascendió pero la Comuna no ha emitido postura alguna sobre la suspensión del funcionario.
Tlapanalá, solo se quedó con dos elementos, uno que fue policía y después fue asignado a Protección Civil, además de un militar que se incorporó a la policía, pero durante la mañana del jueves 16 de mayo, los integrantes de la policía de la junta auxiliar de Las Palmas, se habrían sumado para proporcionar este servicio.
Durante la tarde del 15 de mayo, en sesión de Cabildo, se votó a favor por la suspensión de actividades del director de Seguridad Pública.
Los uniformados, intentaron sostener un diálogo con el alcalde, para exponerle algunas propuestas, pero nunca llegó y procedieron a renunciar.
Un elemento, indicó que después, se solidarizaron con el funcionario suspendido debido a que “hemos realizado operativos, con saldo de detención de motocicletas con reporte de robo, pero el presidente municipal ordenó la devolución a sus propietarios sin que se aplicara el protocolo correspondiente, además, que son vehículos usados en actividades ilícitas”.
Hubo dos ocasiones, que el propio director de Seguridad Pública, puso (dinero) de su bolsa para el llenado del tanque con combustible porque el presidente municipal no se ocupaba de este tema, pero tampoco preguntó cuando fuimos atacados por desconocidos con armas de fuego, si estábamos bien o mal.
Agregó que anomalías como el desabasto de combustible, solo en tres años, dotó de un uniforme, sin equipo, es como operaba la Policía Municipal que en varias ocasiones, el propio alcalde solicitó que lo custodiaran cuando acudió a domicilios particulares a consumir bebidas alcohólicas a altas horas de la madrugada o que le custodiara en sus actividades proselitistas.

